CON UN INÉDITO POEMA DE AMOR

Enrique García Velloso y familia. Principios del siglo XX.

Notable conjunto formado por tres obras fotográficas vintage y un poema manuscrito. Las imágenes nos presentan al autor argentino en un retrato de la casa A. S. Witcomb, a su madre, y al propio Enrique con su padre y otros familiares. El timbre especial de este ramillete lo ubicamos en el texto literario que enriquece el primero de los retratos mencionados.

A. S. WITCOMB –

Retrato de Enrique García Velloso. Buenos Aires. 1907.

Gelatina de plata: 17,9 x 11,9 cm. Tono sepia. Soporte Secundario. Cartulina blanca. Recuadro gofrado. Obra en excelente estado de conservación.

Durante los largos años de investigación que hemos transitado por la antigua fotografía argentina, nunca vimos un ejemplo literario anexo como el presente y donde el retrato posado de un caballero, sirve como imagen y soporte apasionado para una larga misiva amorosa.

Sobre la misma emulsión fotográfica, un enamorado Enrique García Velloso Reta (1880 - 1938), ha escrito en 1907 y con una hermosa caligrafía, un encendido texto -inédito- a su prometida María Teresa Ubago y futura esposa y ambos, los padres de la infortunada Luz María García Velloso (1910-1925)

"Maria Teresa!: Quisiera estar sombrero en mano y haciendo el gesto reverente que ejecutan los gentiles-hombres ante la presencia de su reina. Cada hombre vale, lo que el ideal soñado. Ese ideal, todos mis sueños y todos mis ensueños hacia ti van como palomas mensajeras, en bandada purísima de cariño. Una paloma, la generala, lleva en su pico una mancha roja como un rubí: es sangre de mi corazón. abrele de par en par el nido. Y cuando llegue la última, la que en sus alas tiene impreso el dolor de toda una vida, mátala; mátala con un beso asfixiante de pasión. Quiero que seas tú la enterradora de mis penas, porque eres la chispa que incendió la hoguera de la mayor alegría: la de haberte conocido." A continuación, lo firmó y fechó en Buenos Aires.

Enrique García Velloso fue una de las grandes figuras intelectuales de su época a nivel nacional e inclusive internacional. Dramaturgo, poeta, autor, profesor, director de cine y de teatro, y prolífico guionista. Su nombre se inscribe entre los precursores cinematográficos del país. Escribió más de 100 obras teatrales y en casi todos los géneros.

BIEDMA FOTÓGRAFO

Inés Reta de García Velloso. Madrid. Circa 1907.

Gelatina de plata: 13,2 x 7,7 cm. Con la publicidad del estudio fotográfico en el soporte secundario: "Biedma Fotógrafo (en óvalo) - Alcalá 23 - Hay Ascensor - Madrid". Y al dorso, manuscrito: "Inés Reta de García Velloso, madre de Enrique García Velloso - 1876". Obra en excelente estado de conservación.

Doña Inés Reta -nacida en Pamplona en 1858- había contraído enlace con el prestigioso escritor y poeta Juan José García Velloso y fue la madre de otra gloria de la dramaturgia argentina, Enrique García Velloso. Falleció en Buenos Aires en 1934. Aquí la apreciamos en su juventud, posando en el estudio del fotógrafo español Biedma, en pleno corazón de la capital española.

PALERMO CHICO

Juan José García Velloso, su padre. Buenos Aires. 1905.

Gelatina de plata: 7,9 x 11,2 cm, en tono sepia, montada sobre una cartulina rígida impresa, con la publicidad: “Palermo Chico / Estudio Fotográfico / Fotografía nocturna / Avenida Alvear, 1433”. Y una leyenda manuscrita, detrás: “Juan José María Velloso, con su nieto “Totolo” y sus hijos Enrique, Ramiro, María Inés y Armando. Año 1905”.

Simpático retrato grupal; el abuelo sostiene a su nieto, que no logró permanecer quieto para el mejor registro. Todos miran la cámara. Visten las mejores galas. El retrato lo realizó un modesto estudio fotográfico ubicado en las cercanías del Jardín Zoológico, cuya clientela estaba basada en el registro de las familias porteñas con sus niños. El soporte de cartulina rígida, diseñado para retratos de tipo vertical, debió usarse en base horizontal para contener al numeroso grupo. Otro detalle interesante se percibe en las dos manchas oscuras del lateral derecho y que corresponden a sendos ganchos sujetadores del negativo de vidrio en el chásis del porta placa.

Consideramos estas tres fotografías vintage como un conjunto iconográfico excepcional, sobre una familia de talentosos autores cuyas huellas aún persisten en la cultura nacional.

Abel Alexander

Presidente de la Sociedad Iberoamericana de Historia de la Fotografía