Un artista italiano de la cámara
Si bien la fotografía arribó a estas playas hacia 1843, la recuperación de su rica historia se inició entre nosotros recién a partir de la década de 1980 y hasta el presente, los avances historiográficos han sido notables tanto por la calidad de sus investigaciones como por la cantidad de trabajos aportados, en especial a través de los exitosos Congresos de Historia de la Fotografía, iniciados en 1992.
Ya desde la etapa pionera de los daguerrotipos la ciudad de Buenos Aires concentró en sus límites la mayoría de las actividades fotográficas del país, tanto en el campo profesional como amateur. El aluvión inmigratorio europeo -en especial a partir del último tercio del siglo XIX- trajo consigo una significativa cantidad de fotógrafos italianos, franceses, ingleses, alemanes y de otras nacionalidades quienes, con sus primitivas cámaras a cuestas, acompañaron a sus paisanos en la esforzada tarea de documentar la aventura transatlántica de "Fare l'America"
De aquella miríada de pioneros hoy queremos rescatar la olvidada figura de Félix Pitré (también identificado como Félix N. Pitré) del cual poco o nada se conoce, aunque debemos señalar que fueron justamente los profesionales italianos quienes dominaron el panorama fotográfico argentino en el período comprendido entre 1880 y aproximadamente 1920 y, por supuesto, Félix Pitré formó parte de este contingente mayoritario.
El inmigrante Pitré entre censos y bautismos
Realizamos esta aclaración pues para algunos investigadores y aún en varios catálogos se lo consigna erróneamente como de nacionalidad francesa, seguramente por las características de su apellido. Félix N. Pitré era oriundo de la bella Italia y así lo consigna taxativamente el primer Censo Nacional del año 1869 -iniciativa del presidente Domingo Faustino Sarmiento-, que arrojó un total nacional de 1.830.214 habitantes, de los cuales 187.346 vivían en la ciudad de Buenos Aires. Pitré fue un artista del pincel y la cámara.
La información más temprana lo encuentra arribando al puerto de Buenos Aires venido desde Rosario en el vapor nacional Pavón, el 11 de septiembre de 1862 [1]. Sobre su presencia en los registros censales, los primeros nos fueron proporcionados por el investigador Oscar Levin y recientemente la genealogista Rosario García de Ferraggi nos completó la información, enriquecida por el hallazgo de las partidas de bautismo de dos de sus hijos.