Anales de la Asociación de Criadores de Criollo.

Buenos Aires. 1927 - 1937.

Un tesoro para los amantes del caballo criollo. Conjunto de cinco números inhallables de la revista publicada por la Asociación de Criadores de Criollo, así denominada por entonces, en sus primeros años de vida. Todos los ejemplares (26,7 x 18,5 cm) con sus cubiertas originales, y en general en muy buen estado.  Año II - Junio 1927 - Núm. 3: 52 pp. Año III - Agosto 1928 - Núm. IV: 68 pp. Año VI - Septiembre 1931 - Núm. IX: 76 pp. Año VII - Agosto 1932 - Núm. X: 68 pp. Año XII - Octubre 1937 - Núm. XVI: 60 pp.

En las cuatro primeras entregas aquí reunidas, damos con un texto del doctor Emilio Solanet. En el número 3 se publicó su tesis presentada y aprobada en la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires, cuyo tema fue “Las capas del Caballo Criollo”, su primer aporte a un tema tan caro al conocimiento de los entendidos en esta raza. En dicho número también damos con una carta enviada al propio Solanet por Aimé Tschiffely desde Bogotá; marchaba hacia Nueva York en sus montados Mancha y Gato. Además, en la Editorial se hace una mención al debut de un joven expositor en la Rural de 1926, Roberto Dowdall.

En “Anales” de 1928 -número IV-, entre otras notas se da a conocer el éxito del Raid Hípico Buenos Aires - Nueva York, con varios artículos, y continúa Solanet con su análisis de los pelajes. El conjunto ofrecido prosigue con el número IX (1931), incluye un texto de E. Solanet referido a la iconografía del caballo criollo. Su mirada experta se concentra en la veracidad de los caballos representados por distintos autores, como Prilidiano Pueyrredón, Methfessel, Meyer, Grand, Blanes, Della Valle entre otros. Acompañan una semblanza sobre Roberto B. Cunninghame Graham escrita por Justo P. Sáenz, y un texto de A. F. Tschiffely: ¿Vale la pena conservar el Caballo Criollo?.

En la revista número X, de 1932, Solanet prosigue con su estudio sobre la iconografía del caballo criollo -ilustrado con numerosas fotografías de Francisco Ayerza y de otros miembros de la Sociedad Fotográfica Argentina -así la titula-, fundada en 1889 “por el esfuerzo de virtuosos como Francisco Ayerza, Leonardo Pereyra y Ángel Roverano”. Acompañan este extenso artículo, otros dos textos señeros, de Justo P. Sáenz: Equitación gaucha de la llanura, y de Ángel Cabrera: Para la historia del caballo criollo. La verdad sobre el pelaje bayo.

En el número XVI de Anales (1937), prosiguen los ecos del viaje de Tschiffely en sus criollos salidos del haras El Cardal, de Solanet, y entre otros textos encontramos la pluma de Edmundo Wernicke y de R. Lehman Nitsche.

ODM